¿Cuál es el dulce más antiguo del mundo?

La historia con respecto a los dulces es extensa, pero resulta más importante sus orígenes, y para esto, vamos a trasladarte a Valencia, específicamente a las famosas cuevas de la Araña, en Bicorp, donde está la primera representación de un panal de miel, llamada “Recolectora de miel”, en esa imagen se muestra a dos personas recolectando miel de abejas, y es de hace 8.000 años.

La miel es un producto que fue usada y extendida por distintas culturas de la antigüedad, fue usada en China, Oriente Medio, Egipto, Grecia y en todo el Imperio Romano para cubrir frutas y flores, esto para conservarlas o convertirlas en lo que fue el primer dulce, y es algo que Paul Chrystal plasma en su libro The History of Sweets, donde muestra todo el pasado y presente de los caramelos y las golosinas conocidos en Inglaterra.

Gracias a los jeroglíficos del Antiguo Egipto se sabe que hace 3.000 años, la floreciente industria cultural, política y gastronómica creada alrededor del Nilo, contaba con un desarrollado arte de la confitería, muestra que se usaban higos, dátiles y especias para condimentar la miel.

De acuerdo con la historiadora María Ángeles Pérez Samper, quien es responsable del reciente “Comer y beber: Una historia de la alimentación en España”, fue gracias a los romanos que la dulcería con miel llegó a España. Fueron los romanos quienes le dieron importancia al pastelero para que se le considerara un hábil artesano. Y, asimismo, se debe recordar como en las excavaciones de la antigua ciudad de Herculano, que fue sepultada por la erupción del Vesubio en el 79, se encontró que ya contaban con cocinas equipadas con ollas y sartenes muy parecidos a los usados actualmente por los reposteros.

Caña de azúcar 

Otro alimento que forma parte importante de la historia de los dulces, y que va completamente ligado con la forma de endulzar en la actualidad es la caña de azúcar, la cual es autóctona del sureste asiático. Fue en la India donde por primera vez hirvieron el jugo de caña de azúcar y obtuvieron el llamado Khanda, que da origen a la palabra Candy (caramelo en inglés), que significa, “cañas que producían miel sin abejas”.

Esto se extendió desde allí a todo el mundo. En el siglo VII a.C. el Imperio Persa ya había diseñado una forma hábil para refinar el azúcar, la cual es la base de la confitería moderna, según señala la escritora y asesora de cocineros, Rosa Tovar. Los que mejor uso le ha dado a la azúcar son los hispanos musulmanes, y es que todos los dulces con yema que han llegado al continente son de influencia árabe y usaban azúcar refinada.

Comenta también que el turrón es una receta autóctona de España del siglo XVI, o también del caramelo, sin azúcar refinada no se puede hacer caramelo. El postre más típico de la cocina española para aquella época de 1607, era de origen judío, llamado bollo maimón, se piensa que su nombre viene de maymón, que a su vez viene de Moshé be Maimón o Musa ibn Maymun, llamado desde el Renacimiento Maimónides, hijo de Maimon, quien fue un famoso médico, rabino, filósofo y teólogo judío español de la Edad Media.

El nombre se le dio porque el dulce tenía forma de sombrero y recordaba el turbante usado por el sabio antes mencionado, era una receta a base de una masa de bizcocho en gorma arroscada. Esto permite ver como los postres en la gastronomía española tuvieron mucha influencia árabe, introdujeron la caña de azúcar y enseñaron como refinarla, también revolucionaron el mundo de los pasteles y dulces, que eran sencillo y se hacían de manera similar que el pan y luego los endulzaban con miel.

Un ejemplo claro de esto son los buñuelos, las almojábanas o tortas de queso fritas, el arrope, que es un sirope parecido a la mermelada o los mazapanes. Fue gracias a los árabes que la azúcar se expandió al resto del mundo y cambió el mundo de la repostería, todo basado en los dulces más antiguos del mundo, la miel y la caña de azúcar.