¿Por qué se cuelgan los jamones?
La razón por la que los jamones se cuelgan en el techo es para permitir que el jamón se conserve y se aire bien, además, esto le da un mejor aroma y una excelente textura y para que pierda la humedad y el exceso de grasa. Esta es la principal razón de por qué se cuelgan los jamones.
La tradición de colgar jamones en bares, restaurantes y tiendas es una costumbre española que se ha transmitido a lo largo del tiempo. Colgar el jamón en el techo permite que envejezca más rápido porque está expuesto a más aire, lo que mejora su sabor y textura.
El colgado de jamones en el techo es una preparación culinaria tradicional que se sigue desde hace cientos de años en España. El jamón, que es un manjar además de un patrimonio cultural, se ha utilizado durante siglos para conservar los alimentos y proporcionar proteínas para los días en los que no había calor ni luz natural.
Origen de la tradición
El origen de la tradición de colgar jamón en España no está del todo claro. Los primeros registros indican probablemente fue traída a España por los romanos. Algunos académicos dicen que la tradición romana fue enterrada por el cristianismo y luego renació durante las fiestas cristianas para celebrar su conversión. Otros historiadores dicen que no hubo tal tradición y que esos productos se colgaban porque necesitaban una temperatura y humedad constantes para no enmohecerse.
¿Cuánto tiempo se cuelga un jamón?
Los jamones suelen colgarse durante la fase de curado, que consta de dos fases. En primer lugar, el proceso de curación se completa con el secado al aire en una sala de temperatura controlada durante unos días. A continuación, el jamón se cuelga durante un período prolongado para que la carne se cure completamente y desarrolle su sabor y textura característicos. El tiempo de curación de un jamón varía en función del tipo de jamón y de la calidad de la carne.
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